Última actualización el 17 de junio de 2024
Arrecife, 12/06/18.- El ingenio y la ilusión de tres profesores del Instituto Marítimo Pesquero de Canarias en Arrecife, los ha llevado a construir una campana húmeda para realizar las prácticas del ciclo de buceo. Este tipo de infraestructura está valorada en unos 200 mil euros y no existen centros formativos que la tengan en propiedad.
José Moreno, Huberto Llusía e Israel Martín, realizaban hasta ahora las prácticas de campana húmeda en sus clases con simuladores, diapositivas y vídeos. Lo habitual es alquilarla, cuenta Israel Martín, pero en Lanzarote no existen empresas que presten este servicio, así que los alumnos del módulo de buceo debían conformarse con el simulador. El diciembre pasado decidieron aventurarse en la construcción de este artefacto utilizando su ingenio, material reciclado y una gran dosis de entusiasmo. El resultado ha sido la campana húmeda que pudieron estrenar el pasado sábado durante la actividad de limpieza de fondos marinos que realizó el Instituto Marítimo Pesquero de Arrecife en colaboración con los clubes de submarinismo de la isla.
Una escuela líder en innovación
La Cámara de Comercio de Lanzarote, en continua coordinación con los centros públicos de Formación Profesional, para impulsar una formación adaptada a la demanda empresarial, considera esta apuesta como un gran posicionamiento para nuestra Escuela de Pesca, que se pone por delante de otros centros formativos del país en innovación y tecnología, ofreciendo una formación puntera en materia náutica y marítima.
¿Qué es una campana húmeda y para qué sirve?
Es una estación base, colgada de un cable, que se baja a los fondos submarinos y sirve para transportar buceadores, para realizar descompresiones, como soporte y asistencia en rescates, y en todo tipo de trabajos submarinos. Funciona como un puerto base que ofrece seguridad al buceador profesional. Aparentemente es como una jaula, que cuenta con una cámara estanca, con manómetros (para medir la presión), llaves para comunicaciones y otros elementos que ofrecen seguridad a los buceadores a grandes profundidades.
Esta iniciativa no hubiera sido posible sin el apoyo de su director, Javier Fraile, implicado en darle proyección a un centro que ya goza de gran prestigio en el sector profesional. Así lo demuestra la gran afluencia de estudiantes que cada año llegan de fuera de Lanzarote. Concretamente el Grado Medio en Operaciones Subacuáticas e Hiperbáricas, registra un porcentaje de alumnos de fuera de la isla que está en torno al cincuenta por ciento. Con la nueva campana húmeda, muchos más serán los que quieran formarse en el Instituto Marítimo Pesquero de Lanzarote, ya que acaba de ganar un importante plus de calidad.