Última actualización el 17 de junio de 2024
Artículo de opinión José Torres fuentes, presidente de la Cámara de Comercio de Lanzarote y La Graciosa.
24/03/21.- Parece obvio que lo cogemos, sin embargo, la realidad es bien distinta. Llevamos años tirando el dinero que Europa nos asigna a través de Fondos Europeos. Y es que no tenemos capacidad o no sabemos ejecutarlo a tiempo. Así que devolver dinero no invertido es más habitual de lo que nos gustaría. ¡Con la necesidad que hay!
La crisis provocada por la pandemia de la Covid-19 ha movilizado una respuesta financiera europea sin precedentes. La economía española se enfrenta a una oportunidad histórica de transformación. En este contexto, Canarias será una de las regiones más beneficiadas, pero no lo logrará si no consigue antes adaptar su aparato administrativo a este escenario.
Sería una gran tristeza que no pudiéramos ejecutar estos fondos. España, con una administración absolutamente descoordinada y excesivamente burocratizada, en comparación con otros países de la Unión Europea de mayor población, no es capaz de ejecutar más del 50% de los fondos que le llegan a través del Fondo Social Europeo o los Fondos FEDER, periodo tras periodo. Y esto viene siendo así, casi por tradición. La burocracia administrativa que tenemos es enorme, la descoordinación entre administraciones es cada vez mayor, la complejidad de los expedientes de cierta relevancia crece exponencialmente, mientras se nos sigue hablando de simplificación administrativa, y la productividad en los despachos es escasa.
Es imperativo realizar una planificación con unos objetivos y unos mínimos que marquen un cambio estratégico. Necesitamos incorporar actores externos a la administración para lograr mayores porcentajes de ejecución. Es preciso aplicar gestión empresarial a la poco eficiente gestión de la Administración. Debemos terminar con los reinos de taifas en favor de una correcta organización del sistema administrativo. Sin ese cambio, no podemos afrontar retos como el cambio climático, la innovación, la digitalización, la resiliencia, los recursos naturales, la gestión de la migración y fronteras y otros asuntos inminentes, y no podemos porque a este paso, tendremos que devolver el dinero sin poder ejecutarlo.